Blogia
VOZ UNIVERSITARIA

Ciencia y tecnología

De la BBC..

De la BBC..

Muchos no quisieron creer porque quienes advertían sobre el riesgo de cultivar soya, maíz y otros alimentos para producir biocombustibles eran Hugo Chávez y Fidel Castro.

Tal vez hicieron bien en no creer en palabras de políticos, que usan el lenguaje y todo lo que pueden para hacer posible lo necesario. Pero a ver qué les dicen a los treinta y tantos científicos que pasaron tres años estudiando el estado de la agricultura y llegaron a la misma conclusión que Fidel y que Chávez.
Y a ver qué les argumentan a los gobiernos de más de sesenta países que reconocieron la necesidad de que la agricultura y sus frutos sirvan primero que nada para evitar hambre, pobreza y muerte, palabras que en muchos casos son nombres de la misma tristeza.

Una de las cosas que uno aprende en la BBC es que las historias que vale la pena contar son siempre sobre personas, porque el ser humano sigue siendo la medida de las cosas, hasta para los maltusianos que aseguran que hay hambre porque hay mucha gente.

No se ha prestado atención
Sólo por inocencia o por maldad se puede ser maltusiano e ignorar que las hambrunas no se deben a falta de alimentos sino a la mala y desigual distribución de los alimentos, que por necesidad afecta a los más pobres.
El documento de las Naciones Unidas -preparado por una entidad internacional e interdisciplinaria que se encarga de la evaluación del conocimiento agrícola, de la ciencia y de la tecnología para el desarrollo- es claro.
Uno se entera de que "pese a los importantes logros científicos y tecnológicos de nuestra capacidad para incrementar la productividad agrícola, no se ha prestado suficiente atención a algunas de las consecuencias sociales y ambientales de esos logros".

Y dice más el documento. Dice que las metas de desarrollo y sustentabilidad deben ubicarse en un contexto tan complicado como preocupante, en el que intervienen las desigualdades económicas y sociales y las incertidumbres políticas provocadas por la guerra y otros conflictos.
Y dice que también también hay incertidumbre ante la posibilidad de producir suficientes alimentos y hacerlos accesibles a todos, incertidumbre ante el futuro de los precios, incertidumbre ante los cambios de las economías basadas en combustibles fósiles, incertidumbre ante la emergencia de nuevos competidores por recursos naturales, y preocupación ante el aumento de enfermedades crónicas a consecuencia de la desnutrición y la mala calidad de los alimentos.

Paradojas de nuestro tiempo
En el Reino Unido entró en vigor esta semana una ley que obliga a las gasolineras a vender dos litros y medio de biocombustible por cada cien litros de gasolina o de diesel. Pero las cosas cambiaron desde que se aprobó la propuesta.
El gobierno británico parece aceptar ahora que la producción de biocombustibles contribuye a encarecer los alimentos, como declaró de manera inequívoca el ministro de Economía Alistair Darling, quien advirtió que sería un serio error llegar a una situación en la que se cultive maíz -un alimento esencial- para usarlo como combustible.
El secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, señaló hace un mes que hay expertos preocupados porque el auge de los bio-combustibles ha reducido la cantidad de alimentos disponibles para los seres humanos.
Josette Sheeran, directora del Programa Mundial de Alimentos, dijo más. Dijo que la producción de biocombustibles "ha sacado cientos de millones de toneladas métricas de producción agrícola de la cadena de los alimentos y ha hecho que, en muchos lugares, estos alimentos se coticen a precio de combustible".
Una de las paradojas más tristes de nuestro tiempo y del capitalismo es que las cosechas van a parar al mejor postor, que gana más vendiéndolas como combustible que usándolas como alimentos.

La explicación presidencial
Por eso resulta difícil entender la decisión del presidente Luiz Inácio Lula da Silva de promover los biocombustibles como una de las vías de desarrollo de Brasil, y de ignorar las advertencias de individuos y de instituciones.
Es más, el presidente de Brasil rechaza que algunos alimentos sean más caros porque se destinan no al consumo humano sino al consumo de las máquinas.
"Que no me vengan a decir que los alimentos están caros en este momento a causa de biodiesel", declaró Lula en Brasilia esta semana. "Los alimentos están caros en este momento porque el mundo no estaba preparado para ver que millones de chinos comieran, que millones de indios comieran".
Pero un presidente, aunque sea maltusiano, no puede darse el lujo de estar mal informado. No, presidente.

Monitorean el cambio climático con satélites

Monitorean el cambio climático con satélites
Tomado de:

El Universal
Viernes 30 de marzo de 2007    Url:http://www.eluniversal.com.mx/cultura/52084.html

B ERLÍN (Notimex).- Servicios meteorológicos europeos iniciaron un proyecto conjunto para monitorear el desarrollo del clima global con la ayuda de satélites.

El presidente del Servicio Alemán del Clima (DWD), Wolfgang Kusch, dijo que en vista de lo que implica el cambio climático en las sociedades industrializadas, cada vez es más necesario contar con datos sobre el desarrollo del clima.

Expertos de servicios meteorológicos europeos (de Bélgica, Finlandia, Holanda, Suecia y Suiza, entre otros países), pusieron en funcionamiento hace unas semanas el proyecto que se concentra en observar el clima con satélites.

El director general de la organización europea Eumetsat, Lars Prahm, señaló que este programa permitirá observar los cambios climáticos naturales y aquellos causados por el hombre y su desarrollo, y se podrá valorar con base en mediciones de tiempo y espacio.

En vista de la dimensión del proyecto y del número de expertos necesarios, así como de los altos costos, era imprescindible crear una cooperación internacional.

El sistema satelital ofrecerá productos que brindan información sobre componentes importantes del clima, como el contenido de radiaciones terrestres, el contenido de vapor y datos sobre las nubes.

Además de las ventajas para la observación climática, Clima SAF contribuirá a un mejor aprovechamiento de la energía solar.

UN DISPOSITIVO QUEMA COMBUSTIBLE CON UN NIVEL DE EMISIÓN CERCANO A CERO

UN DISPOSITIVO QUEMA COMBUSTIBLE CON UN NIVEL DE EMISIÓN CERCANO A CERO Han creado un nuevo combustor (cámara de combustión donde se quema combustible para impulsar un motor o turbina de gas) diseñado para quemar combustible en una amplia gama de dispositivos, con casi ninguna emisión de óxido de nitrógeno (NOx) y de monóxido de carbono (CO), dos de las causas principales de polución aérea.

El desarrollo de este combustor lo han efectuado investigadores del Instituto Tecnológico de Georgia (Georgia Tech).

El dispositivo tiene un diseño más simple que los mejores combustores existentes, y podría fabricarse y mantenerse a un costo mucho más bajo, haciéndolo más económico en todo tipo de aplicaciones, desde motores a reacción y plantas de producción eléctrica hasta calentadores de agua domésticos.

Obtener emisiones ultra bajas se ha vuelto una prioridad para los investigadores de la combustión.

El dispositivo del Tecnológico de Georgia, originalmente desarrollado para la NASA, reduce de manera significativa las emisiones de NOx y CO en una gran variedad de motores de aeronaves y turbinas de gas que queman combustibles gaseosos o líquidos. Quema combustible generando emisiones de NOx por debajo de 1 parte por millón (ppm) y emisiones de CO menores de 10 ppm, claramente inferiores que las emisiones producidas por otros combustores.

La meta inicial del proyecto era desarrollar un combustor con bajo nivel de emisiones para motores de avión y para turbinas de gas destinadas a producción de electricidad, que deben quemar de modo estable cantidades grandes de combustible en un volumen pequeño y con una amplia gama de demanda de potencia (o ritmos de flujo de combustible). Pero el diseño puede adaptarse para el uso en una gran gama de aplicaciones, incluyendo las de gran envergadura como generación de electricidad mediante turbina de gas, y las de escala tan pequeña como un calentador de agua en una casa.

El combustor quema el combustible en reacciones de baja temperatura que se desencadenan en una porción grande del combustor. Eliminando todas las bolsas de alta temperatura gracias a un mejor control del flujo de los reactantes y los productos de la combustión dentro del combustor, el dispositivo produce niveles mucho más bajos de NOx y CO, y evita inestabilidades acústicas que resultan problemáticas en los actuales combustores de baja emisión.

Para reducir las emisiones en los combustores existentes, el combustible es premezclado con una gran cantidad de aire circulando en un violento flujo, antes de la inyección en el combustor. Esto requiere diseños caros y complejos, y el proceso de la combustión a menudo excita inestabilidades que dañan al sistema.

Pero el diseño del Tecnológico de Georgia elimina la complejidad asociada a la premezcla de combustible y aire, gracias a inyectar por separado el combustible y el aire en el combustor, mientras que su forma les obliga a mezclarse entre sí y con los productos de la combustión antes de que se produzca la ignición.

Información adicional en:

FOTOGRAFÍAN UNA FORMACIÓN DE "NUBES NACARADAS" EN LA ANTÁRTIDA

FOTOGRAFÍAN UNA FORMACIÓN DE "NUBES NACARADAS" EN LA ANTÁRTIDA

SÓLO SE FORMAN A 80 GRADOS BAJO CERO

SYDNEY (AUSTRALIA).- Un grupo de investigadores australianos sostiene que las extrañas nubes de color nácar causadas por las extremas condiciones climáticas sobre la Antártida son una posible señal del cambio climático.

Conocidas como 'nubes nacaradas', las espectaculares formaciones que muestran delicados matices de colores fueron fotografiadas sobre la base meteorológica australiana de Mawson el 25 de julio.

El científico Andrew Klekociuk, de la división antártica australiana, afirmó que estas nubes se producían ocasionalmente por el aire que parte de las montañas árticas y antárticas en una latitud polar alta durante el invierno.

"Tienes que estar en la zona del mundo más apropiada en invierno, y tener el sol justo por debajo de tu horizonte para verlas", explicó el investigador.

Este tipo de nubes sólo se forma a una temperatura de menos 80 grados centígrados.

Las delicadas nubes se forman al atardecer, cuando la pálida luz cruza los diminutos cristales de agua congelada suspendidos en la estratosfera.

(tomado de: http://www.cdeea.com/pildoras.htm)

EL AMAZONAS PODRÍA HABER DEJADO DE SER EL PULMÓN DEL MUNDO

EL AMAZONAS PODRÍA HABER DEJADO DE SER EL PULMÓN DEL MUNDO

El Amazonas, considerado hasta ahora el "pulmón del mundo", puede haberse convertido en un emisor neto de dióxido de carbono debido a la quema indiscriminada de sus árboles, según los científicos.

"Hay una gran pregunta sobre si el Amazonas como un todo es una fuente de carbono atmosférico o un lugar donde se almacena", explicó Diane Wickland, directora del programa de ecología terrestre de la NASA.

Los siete millones de kilómetros cuadrados de bosque alrededor del Río Amazonas y sus tributarios, una extensión mayor que Europa, funcionan como un riñón inmenso para el planeta, porque depuran el aire al retirar dióxido de carbono, que es uno de los gases principales que produce el efecto invernadero y el calentamiento global, y expulsar oxígeno.

Ese carbono capturado por la fotosíntesis se almacena en los troncos, las hojas y el suelo, pero el movimiento incesante de la frontera agrícola en busca de más terreno cultivable está liberando esos gases de su cárcel.

"Cuando se hace el cálculo aritmético para intentar ver si en un año entra más dióxido de carbono en el Amazonas del que sale, no está claro", indicó Wickland.La quema de la selva para cultivar soja o criar ganado ha destruido más de 615.000 millones de kilómetros cuadrados sólo en Brasil, que representan el 15% de los cuatro millones de kilómetros cuadrados de la Amazonía de ese país, según el Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (INPE, en portugués). Al ser consumidas por el fuego, las seringueiras, las piranheiras y palmeras como la copaíba sueltan a la atmósfera el carbono en sus fibras y con ello contaminan el ambiente en lugar de limpiarlo.

Descubrir si el Amazonas tiene un efecto positivo o no en el sistema planetario de reciclado del carbono es fundamental para entender el cambio climático y tomar medidas para combatirlo, según los científicos. Esa será una de las prioridades para los próximos años del llamado Experimento de Gran Escala de la Biosfera-Atmósfera en la Amazonía (LBA), según Wickland.

Acuerdos entre Brasil y EEUU

Brasil y EEUU firmaron el jueves en el Museo de Historia Natural de Washington un acuerdo para continuar su colaboración en este proyecto, así como en otro denominado Determinantes Biológicos de Fragmentos Forestales, ambos dirigidos por el Instituto Nacional de Investigaciones de la Amazonía (INPA). "La Amazonía no es un ecosistema, es un conjunto muy grande de ecosistemas", cuya dinámica es muy importante para el clima mundial, explicó Adalberto Luis Val, director del INPA, quien participó en la ceremonia.Mediante el uso de datos de satélites de la NASA, entre otros recursos, el LBA ya ha cambiado la concepción de sus interacciones.

"Antes pensábamos que el bosque captaba más carbono, era más productivo en la temporada de lluvias porque tenía más humedad, pero ha resultado que estábamos equivocados", afirmó Wickland.Los investigadores del LBA, que es el mayor proyecto del mundo sobre la interacción entre los bosques tropicales y la atmósfera, han demostrado que las plantas capturan más dióxido de carbono en la época seca porque hay menos nubes que oculten el sol.

Al mismo tiempo, los grandes árboles amazónicos tienen raíces profundas que les permiten llegar a suelos húmedos. En cambio, las zonas desforestadas para cultivos u ocupadas por bosques 'secundarios', que han crecido después de una tala, no cuentan con esas raíces profundas y son más susceptibles a la sequía, como la sufrida el año pasado, la peor en más de 50 años.

Otro de los descubrimientos del LBA es que algunas regiones de la cuenca del Amazonas se comportan como un "océano verde". En el mar, los núcleos de condensación que forman las nubes son diferentes que en la tierra porque el tamaño de las partículas que transportan es distinto. En la época de lluvias, la humedad es tal que las copas de los árboles en la zona occidental del Amazonas actúan como la superficie de un océano, según los científicos.

"Los meteorólogos se rascaban la cabeza y decían 'no puedo creer lo que ocurre aquí'" cuando se dieron cuenta del efecto, según Wickland. El descubrimiento "cambia de modo fundamental la forma en la que computamos el efecto del Amazonas en el clima mundial", añadió.

(Tomado de: http://www.cdeea.com/pildoras.htm )